SE CONFIRMA AUTORÍA YIHADISTA EN ASESINATO DE PERIODISTAS ESPAÑOLES EN BURKINA FASO
Según reporta hoy la cadena SER, se ha confirmado la autoría yihadista en el asesinato de los periodistas españoles David Beriáin y Roberto Fraile, junto al ecologista irlandés con quien viajaban para realizar un reportaje sobre la caza furtiva. Los datos con los que trabaja ahora mismo el ministerio de Defensa a través del Centro Nacional de Inteligencia desplegado en el Sahel corroboran que los periodistas y el ecologista irlandés fueron ejecutados por grupos yihadistas que operan en la zona. No fueron ni criminales ni cazadores furtivos, sino grupos vinculados al yihadismo radical.
El CNI y la Comisaría General de Información a quien le corresponde la investigación tratan de dirimir si fue Al Qaeda o Dáesh, aunque fuentes de la investigación consultadas por la Cadena SER inclinan más como hipótesis de trabajo por la opción de Dáesh analizando el modus operandi del secuestro y de la ejecución.
La Asociación Andaluza Víctimas del Terrorismo (AAVT) se ha unido al clamor, indignación y tristeza de toda la sociedad por el asesinato en Burkina Faso el pasado 27 de abril, a manos de terroristas yihadistas, de los periodistas españoles David Beriáin y Roberto Fraile, junto a un activista irlandés de una Organización No Gubernamental.
Los dos periodistas realizaban un reportaje para Movistar sobre la caza furtiva en el este del país junto a una ONG de la que era miembro el irlandés que los acompañaba, cuando fueron emboscados por individuos armados a bordo de dos camionetas pick up y de motos, en una carretera que conduce a la reserva forestal de Pama.
Tal como ha contado en reiteradas ocasiones en el último año, justamente en la frontera entre Burkina Faso y Mali, en pleno Sahel africano, se mueven grupos yihadistas como el llamado Estado Islámico del Gran Sahara y el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes, vinculado a Al Qaeda.
David Beriáin, navarro de 44 años y periodista de televisión, había desarrollado una intensa labor reporteril en varios países, desde Afganistán hasta México, cubrió en Libia la caída de Trípoli y se había ocupado del narcotráfico, las mafias y la selva amazónica. Tenía su propia productora, 93 Metros, con su esposa, Rosaura Romero. Pero antes trabajó durante seis años en la sección de Internacional del periódico La Voz de Galicia, con el que fue enviado especial en la segunda guerra de Irak y Afganistán y también estuvo una temporada en Argentina, en el diario El Liberal, y trabajó en el programa REC de Cuatro y en Antena 3, donde realizo un reportaje sobre Fukushima.
Según recordaron sus compañeros de profesión, su reportaje «Diez días con las FARC» le valió en 2009 el premio de periodismo digital José Manuel Porquet, así como ser finalista en el Bayeux de Normandía, uno de los galardones más importantes para corresponsales de guerra. Igualmente, su documental «El negocio del secuestro en Venezuela» fue nominado en 2019 a los premios RealScreen Awards, en la categoría de documentales de actualidad y ese mismo año estuvo nominado al Emmy por su documental «Latinos en el corredor de la muerte».
Hace apenas unos meses, en una entrevista hablaba sobre su trabajo señalando: «No voy a esos sitios para probar a nadie que soy muy valiente, es más, ya lo digo, no lo soy, soy muy cobarde, gallina, capitán de la sardina, y además defiendo el miedo, el miedo es una cosa necesaria, el miedo es un mecanismo que tiene el cuerpo para decirte, mira, no deberías estar aquí, y es verdad, nadie debería estar ahí, nosotros vamos para contar una historia, ese es el punto, vamos para contar una historia, si no contamos la historia, es mejor que no vayamos, nadie debería ir».
Por su parte, el vasco Roberto Fraile, oriundo de Barakaldo, Bizkaia, de 47 años y padre de dos hijos, era otro veterano de la cámara. En el 2012 resultó herido por metralla en la pelvis en diciembre del 2012 cuando cubría en Alepo la guerra siria.
Estaba afincando desde hacía más de 25 años en Salamanca y trabajó hasta fechas recientes en la Televisión Castilla y León, un empleo que compaginaba con la grabación de documentales. «Era la mano derecha de David. Era cámara, pero también periodista de conflictos, y los dos habían estado en todas», contó a la prensa Adriano Morán, director de la productora 93 metros.
Entre los documentales en los que trabajó Fraile se incluye el de la celebración de los 80 años de la Agencia Efe, «La Agencia», proyectado también en el Festival de Cine de Málaga 2020, y en varios foros internacionales.